En una reciente visita a la Universidad Autónoma del Estado de México (UAEMéx), la ingeniera física y Premio Nobel de Física 2018, Donna Strickland, compartió su apasionante perspectiva sobre el fascinante mundo de la física láser. Con una trayectoria destacada en esta área, Strickland no solo iluminó a los estudiantes con sus conocimientos, sino que también ofreció valiosos consejos sobre el camino hacia una carrera científica exitosa.
Strickland, experta en física láser, explicó que esta disciplina se adentra en el estudio de la luz de una manera extraordinaria. A diferencia de la luz convencional, que se dispersa en diferentes direcciones, la luz láser se enfoca en una única dirección, ofreciendo una intensidad sin igual. Esta peculiaridad la convierte en una herramienta invaluable con una amplia gama de aplicaciones en nuestra vida cotidiana.
Entre estas aplicaciones se destaca su uso en cirugías oculares para tratar la retinopatía diabética, así como en tecnologías como los escáneres de supermercados y las comunicaciones de larga distancia a través de la fibra óptica. La capacidad de la luz láser para cauterizar tejidos con precisión milimétrica y su eficiencia en la transmisión de datos hacen de esta tecnología un pilar fundamental en el mundo moderno.
Sin embargo, más allá de sus aplicaciones prácticas, Strickland resalta la fascinación que la velocidad de la luz despierta en ella. Con asombro, comparte que la luz puede recorrer tres cuartas partes del camino hacia la luna en tan solo un segundo. Este fenómeno adquiere una belleza especial cuando se observa a través de la refracción del agua o el cristal, revelando los colores del arcoíris en un deslumbrante espectáculo óptico.
Para la científica canadiense, el futuro de la física láser está lleno de posibilidades emocionantes y desafíos intrigantes. Expresa su interés en aumentar la intensidad de la luz láser y explorar la manipulación de sus longitudes de onda hacia el infrarrojo o los rayos X. Estos avances podrían abrir nuevas puertas en campos como la medicina, la comunicación y la investigación científica.
No obstante, el camino hacia el éxito no ha estado exento de obstáculos para Strickland. Recuerda con humildad los desafíos que enfrentó al buscar oportunidades laborales como docente, así como los sacrificios personales que implicaron seguir su carrera científica al lado de su esposo, también científico. A pesar de las dificultades, Strickland destaca la importancia de perseguir la pasión y encontrar satisfacción en el trabajo realizado.
Sus palabras resuenan como un consejo sabio para las generaciones futuras de científicos y científicas. En un mundo donde la ciencia avanza a pasos agigantados, es crucial cultivar una pasión genuina por el conocimiento y estar preparado para enfrentar los desafíos con determinación y perseverancia. Como Donna Strickland, podemos encontrar inspiración en la maravilla de la luz y en el inagotable potencial de la ciencia para transformar nuestro mundo.

