Con una extensión de aproximadamente 20 hectáreas, de las cuales 16 son un espejo de agua protegido por una malla perimetral, el Bordo «Las Maravillas», ubicado en el Campus «El Cerrillo» de la Universidad Autónoma del Estado de México (UAEMéx), se ha convertido en un refugio clave para diversas especies de aves migratorias. Este espacio, ubicado en el municipio de Toluca, ofrece protección frente a la caza furtiva, la invasión y la depredación, garantizando un entorno seguro para estas especies que viajan desde el sur de Canadá y los Estados Unidos.

En el marco del Día Mundial de las Aves Migratorias, que este 2024 se conmemora el 12 de octubre, el académico de la UAEMéx y encargado del Bordo, León Velázquez Beltrán, explicó la relevancia de este espacio para la fauna aviar. Actualmente, cinco especies de aves residen de manera permanente en «Las Maravillas», entre ellas patos, garzas y gallinas de agua. Sin embargo, la gran protagonista es el pato mexicano (Anas diazi), una especie que fue oficialmente reconocida hace apenas un par de años, y que ha encontrado en este espacio un hábitat idóneo.

Durante la temporada de migración, que inició en septiembre y se intensifica entre diciembre y enero, una decena de especies migratorias arriban al Bordo. Entre ellas destacan el pato golondrino, el pato cucharón, la mareca strepera y el pijije canelo. Estas aves, en su huida del frío invernal del norte, encuentran en «Las Maravillas» un refugio con condiciones óptimas de seguridad y alimentación. Velázquez Beltrán subraya que es posible observar grandes concentraciones de estas aves en las primeras horas de la mañana y al caer la tarde, ya que durante el día se desplazan a los humedales del Lerma, pero regresan a pernoctar al campus.

Este espacio no solo es vital para la conservación y el bienestar de las aves migratorias, sino que también representa una valiosa herramienta educativa y de investigación. La UAEMéx se enorgullece de ser una de las pocas instituciones de educación superior en el mundo en contar con un espacio como el Bordo «Las Maravillas», que no solo contribuye al conocimiento científico, sino también a la protección del medio ambiente.