La inseguridad generada por los cárteles de la droga en cuatro municipios de la Sierra Tarahumara en Chihuahua, se ha salido del control de las autoridades, que no han podido detener las extorsiones, desapariciones y desplazamiento forzados, ejecuciones y enfrentamientos armados.
Especialistas en seguridad han señalado que en los municipios de Guachochi y Guadalupe y Calvo, la escisión del Cártel de Sinaloa es lo que ha generado enfrentamientos constantes, cobros de cuota y desapariciones forzadas.
En otros dos municipios, Madera y Ojinaga, se trata de la lucha por el control de la región entre los cárteles de Juárez y el de Sinaloa.
Por ejemplo, el fin de semana en Guadalupe y Calvo ,dos hombres fueron ejecutados a tiros y fue incendiada una tienda de abarrotes.
Identifican a ejecutados
Los ejecutados fueron identificados como Noé Rascón de 20 años y Eleazar Mendívil.
En Madera tres mujeres han desaparecido luego que sicarios de La Línea incendiaron 14 viviendas y 5 vehículos en la comunidad de La Norteña, para hacer huir a los del grupo contrario de “El Tigre”.
La Fiscalía reportó la desaparición de las hermanas Nayeli y Cindy Delval Olivas, además de Esmeralda Domínguez.
En Guachochi, se han reportado cobros de piso, extorsión, desapariciones forzadas, enfrentamientos y ejecuciones.
En esta región han destruido un par de campamentos de los narcotraficantes, al igual que en Guadalupe y Calvo.
En la frontera oriente de Chihuahua, en Ojinaga y Coyame, los sicarios han realizado diversas incursiones violentas, que provocaron la suspensión de algunos festejos patrios en noviembre.
Fuente: excelsior

