El cáncer de colon y recto se ha convertido en una de las principales amenazas para la salud en México, con un incremento del 45% en los casos registrados entre los años 2000 y 2020, según un estudio reciente publicado en la Revista Universitaria de la Universidad Autónoma del Estado de México (UAEMéx). Este tipo de cáncer ocupa el segundo lugar en mortalidad, afectando a un amplio espectro de la población a partir de los 20 años de edad, sin distinción de zona geográfica o seguridad social.
El artículo titulado Mortalidad por cáncer de colon en México: una llamada a la adopción de un estilo de vida saludable, elaborado por los investigadores Mariana Álvarez, Lina Sofía y Juan Hernández, del Centro de Investigación y Evaluación de Encuestas (INSP), analiza el alarmante crecimiento de esta enfermedad y enfatiza la relación entre los hábitos alimenticios y el riesgo de padecerla.
Según los datos de la Unidad de Inteligencia de Salud Pública, los hombres entre los 40 y 74 años presentan la mayor incidencia de mortalidad por cáncer de colon y recto. No obstante, los investigadores destacan que el sobrepeso y la obesidad juegan un papel determinante en la propagación de este padecimiento. En un país donde el 75% de la población adulta enfrenta problemas de exceso de peso, los riesgos de desarrollar este tipo de cáncer aumentan significativamente.
Los resultados del estudio sugieren que la alimentación deficiente es un factor clave en la incidencia de la enfermedad. Según los autores, «menos de la mitad de los adultos comen frutas y verduras diariamente y 80% consume bebidas endulzadas», lo que incrementa la posibilidad de desarrollar problemas metabólicos y padecimientos relacionados con el cáncer.
Frente a este panorama, los especialistas insisten en la urgencia de establecer políticas públicas que prioricen la prevención. La promoción de hábitos saludables, como una alimentación balanceada y la reducción del consumo de azúcares refinados, es clave para frenar el aumento de los casos.
El estudio también resalta la importancia de fortalecer los programas de detección oportuna, pues el diagnóstico en etapas tempranas mejora considerablemente las posibilidades de tratamiento exitoso. A pesar de los avances en tecnología médica, la falta de acceso a estudios especializados y la desinformación en la población continúan siendo barreras significativas.
El cáncer de colon y recto representa una amenaza creciente para la salud de los mexicanos. Sin embargo, la evidencia presentada por los investigadores Mariana Álvarez, Lina Sofía y Juan Hernández demuestra que es posible reducir su impacto mediante la adopción de un estilo de vida saludable y el fortalecimiento de las políticas de prevención.
Las autoridades sanitarias y la sociedad en general tienen un desafío urgente: fomentar cambios en los hábitos alimenticios, mejorar la educación en salud y garantizar el acceso a servicios médicos oportunos. Solo así se podrá revertir la tendencia ascendente de esta enfermedad y mejorar la calidad de vida de la población.
Para conocer más sobre esta investigación, consulta el artículo completo en: Revista Universitaria.

