En una postura contundente, el presidente nacional del Partido Revolucionario Institucional (PRI), Alejandro Moreno Cárdenas, calificó el proceso de elección judicial que se lleva a cabo este domingo como un “montaje grotesco” y una simulación que atenta contra la democracia y la institucionalidad del país.
Según Moreno, la jornada electoral transcurre en medio del desconcierto ciudadano, con casillas vacías y votantes sin información suficiente sobre el proceso ni sobre los perfiles de los candidatos. “Muchos acuden a las urnas sin certeza, algunos incluso votando al azar o con acordeones en la mano”, señaló el dirigente priista, al acusar al partido en el poder, Morena, de desvirtuar el sentido de esta elección.
Para el PRI, esta elección representa un retroceso en la vida democrática del país y un atentado directo contra la división de poderes. “Han reducido al Poder Judicial a un espectáculo. En lugar de fortalecerlo, lo están destruyendo”, declaró Moreno, en referencia a lo que considera un proceso carente de legalidad y transparencia, impulsado con fines políticos por el oficialismo.
La dirigencia del tricolor confirmó que no participa en el proceso como acto de protesta, al considerar que su involucramiento solo serviría para “legitimar una farsa que traiciona a México”. Con ello, el PRI busca marcar distancia y denunciar lo que percibe como una demolición del México de instituciones y de leyes.
“Ante esto, nuestra obligación es resistir y alzar la voz. Porque el silencio también es complicidad”, concluyó Moreno, al reafirmar que el partido seguirá defendiendo los principios democráticos y el Estado de derecho, en medio de un escenario político que, afirma, se aleja cada vez más de la legalidad constitucional.

