La alcaldesa de Cuauhtémoc, Alessandra Rojo de la Vega, defendió con firmeza la decisión de retirar las estatuas de Fidel Castro y el Che Guevara del Jardín Tabacalera, ante las críticas de la presidenta Claudia Sheinbaum, quien calificó la acción como ilegal y un posible daño patrimonial.
En entrevista con Azucena Uresti, Rojo de la Vega aseguró que las esculturas fueron adquiridas en 2017 con recursos de la alcaldía —600 mil pesos del capítulo 5000— sin consulta vecinal ni procedimiento legal completo. “No fueron donadas, no pasaron por comité, y fueron compradas por Ricardo Monreal sin preguntar a nadie”, afirmó.

La alcaldesa subrayó que el artículo 53 de la Constitución faculta a las demarcaciones para administrar sus bienes, y que está abierta a mesas de diálogo con el gobierno capitalino para definir el destino legal de las figuras. “Estoy en la mejor disposición de acordar una ruta institucional, pero también analizamos la viabilidad de una subasta que permita recuperar recursos para luminarias, calles y espacios públicos”, dijo.
Sobre las críticas personales, Rojo de la Vega respondió: “Fui a Cuba hace 10 años, era una chiquilla. Hoy sé que Cuba no es Fidel ni el Che, es un pueblo empobrecido y reprimido. Defender a esos personajes es ignorar el dolor de millones”.
Acusa doble moral y exige congruencia
En la segunda parte de la entrevista, la alcaldesa cuestionó la postura presidencial: “Me sorprende que digan que subastar algo es daño patrimonial, cuando el expresidente quiso rifar un avión que ni existía. ¿Dónde está la congruencia?”
Rojo de la Vega acusó a Morena de enviar un mensaje peligroso: “Cuando sus aliados cometen delitos, está bien. Cuando sus adversarios lo hacen, es censurable. Esa doble moral es el principio de Morena”.
La funcionaria reiteró que las esculturas representan a “dos asesinos homofóbicos y represores” y que los vecinos llevan ocho meses exigiendo su retiro. “Prefieren parques dignos y juegos para niños que tener a dos figuras que simbolizan represión”, afirmó.
¿Qué sigue para las esculturas?
Rojo de la Vega confirmó que ya ha dialogado con la jefa de gobierno y la secretaria de Cultura para establecer mesas jurídicas. “Estoy dispuesta a sentarme con el gobierno local y federal para definir la ruta legal. Pero aquí no mando yo: mandan las vecinas y vecinos”, sentenció.
La alcaldesa recordó que Sheinbaum, como jefa de gobierno, retiró placas de Díaz Ordaz y el monumento a Colón. “¿Por qué ahora se defiende a otros represores solo porque son de izquierda?”, cuestionó.

