El coordinador de los senadores del PRI, Manuel Añorve Baños, denunció desde su cuenta oficial en X la gravedad de la crisis sanitaria que enfrenta México, señalando que “al menos 44.5 millones de personas NO tienen acceso a servicios de salud”. El legislador calificó esta cifra como “un resultado inaceptable de años de abandono”.
La declaración se da en el contexto de los datos publicados por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), que revelan un incremento alarmante en la población sin cobertura médica. En 2018, el 16.2% de los mexicanos carecía de acceso a servicios de salud (20.1 millones de personas). Para 2024, esa cifra se disparó a 34.2%, es decir, 44.5 millones de personas.
El deterioro fue más severo en zonas rurales, donde la carencia pasó de 13.7% a 48.7% en seis años, afectando a más de 13.9 millones de personas. En áreas urbanas, el número ascendió a 30.6 millones, lo que representa el 30.1% de la población urbana.
Este retroceso coincide con la desaparición del Seguro Popular y la fallida implementación del Instituto de Salud para el Bienestar (Insabi), sustituido recientemente por el modelo IMSS-Bienestar. Aunque el gobierno presume una reducción en la pobreza multidimensional, los datos muestran que 24.4 millones de personas perdieron acceso a servicios médicos durante el sexenio anterior.
Añorve, quien ha sido crítico de los recortes presupuestales al sector salud, insistió en que “no podemos seguir ignorando la crisis”. Su mensaje se suma a una creciente presión legislativa para que el nuevo gobierno federal priorice el abastecimiento de medicamentos, la cobertura universal y la reconstrucción del sistema sanitario.

