Por: Fernando Moctezuma Ojeda – @FerMoctezumaO

Claudia Sheinbaum volvió a llenar el Zócalo, no solo de personas, sino de declaraciones cuidadosamente calibradas. Desde el epicentro de la política capitalina, la presidenta ofreció un espectáculo que combina cifras macroeconómicas, defensas a su antecesor y promesas de un compromiso inquebrantable con “el pueblo”. Todo ello, presentado con la solemnidad de quien parece descubrir el agua tibia.

No es menor la insistencia en la continuidad con López Obrador. El mensaje es claro: no hay ruptura, no hay divorcio, no hay fisura en la 4T. La reiteración es tan enfática que uno podría preguntarse si se trata de un recordatorio para el público o para la propia dirigente, que, al parecer, aún necesita reafirmar su lealtad al movimiento y a quien lo personificó. La defensa a ultranza del expresidente, revestida de elogios y valores intangibles —honradez, austeridad, amor al pueblo—, se mezcla con un contraste implícito: “yo sigo su ejemplo”, lo que suena a certificado de buena conducta política más que a análisis de gestión.

En términos de resultados, los anuncios de Sheinbaum oscilan entre lo impresionante y lo… predecible. Reducción de la pobreza, crecimiento del PIB, fortalecimiento del peso, control de la inflación, menor desempleo, récord en inversión extranjera. Todo medido, todo estadístico, todo entregado en cifras que, por sí mismas, buscan legitimación sin admitir matices ni contradicciones. Es la narrativa clásica del gobierno que se autoproclama eficaz, con el inconveniente de que la vida cotidiana de millones de mexicanos rara vez refleja tales cifras con la misma claridad.

Las reformas y leyes aprobadas —desde la energética hasta la del Poder Judicial— son presentadas como obras maestras de la administración, mientras que la Ley de Amparo recibe una defensa que raya en lo poético: promete justicia expedita, protege al ciudadano y, de paso, asegura que los “potentados de antes” no sigan evadiendo impuestos. La realidad política, sin embargo, suele ser menos ordenada y más ruidosa: la letra de la ley rara vez se traduce en una equidad automática, y la eficacia de las reformas depende tanto de su aplicación como de su diseño.

En materia de seguridad, la reducción de homicidios dolosos en 32% es un dato que impresiona sobre el papel. Pero el discurso omite matices esenciales: concentración geográfica de los logros, impacto social en comunidades vulnerables y percepción ciudadana de seguridad. La política de “construcción de la paz”, presentada como soberana e intocable, es otra pieza de retórica que simplifica lo complejo: la seguridad no se construye solo con números, se construye con estrategia, prevención y confianza institucional.

El cierre del evento, cargado de frases grandilocuentes sobre historia, fuerza, orgullo y compromiso, deja entrever la esencia del acto: un ritual político cuidadosamente coreografiado. La repetición de compromisos casi religiosos —“entregar mi alma, mi vida y lo mejor de mí misma”— tiene la función clara de imprimir solemnidad y legitimidad, mientras se evitan debates incómodos sobre errores, omisiones o contradicciones.

El año de Sheinbaum se resume así: mucho de lo dicho es cierto, pero igual de cierto es que las promesas y el optimismo retórico no siempre coinciden con la compleja realidad de gobernar un país diverso, desigual y lleno de tensiones sociales. Celebrar logros y defenderse de críticos es natural; confundir la narrativa con la realidad, en cambio, es un riesgo que la política mexicana parece asumir con frecuencia.

En el fondo, la 4T de la vida pública mexicana sigue entregando discursos que mezclan cifras, fervor y retórica, dejando al ciudadano la tarea de separar la solemnidad de lo obvio, la promesa de la ejecución efectiva y el aplauso del juicio crítico. La transformación, como siempre, queda a medias entre la narrativa y la acción tangible.

APUNTES CLAVE:

LEY DE AMPARO: La presidenta de la Cámara de Diputados, Kenia López Rabadán, informó que San Lázaro aún no recibe la minuta de la Ley de Amparo aprobada por el Senado. Aunque el proceso legislativo en la Cámara Alta fue declarado concluido, trascendió que el Senado estaría valorando reabrir la discusión del documento, bajo el argumento de que el polémico transitorio rechazado sería una “fe de erratas”. El tema sigue pendiente y genera dudas sobre la legalidad del procedimiento. //BIENESTAR ANIMAL: La Cámara de Diputados turnó a la Comisión de Medio Ambiente la iniciativa de la legisladora Fuensanta Guerrero, que busca prohibir la exhibición pública de animales con fines de venta y fomentar la adopción responsable. En el marco del Día Mundial de los Animales, la diputada llamó a respetar los derechos de todas las especies y recordó que son seres sintientes. //PRESUPUESTO: La diputada Noemí Luna exhortó al gobernador de Zacatecas, David Monreal a otorgar una ampliación presupuestal de 23 millones de pesos al Instituto Electoral del Estado de Zacatecas (IEEZ), tras el recorte del 68% aplicado este año. La legisladora advirtió que la falta de recursos pone en riesgo la autonomía y el funcionamiento del organismo, así como la realización de elecciones libres en 2025.

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