En el marco del CXII aniversario luctuoso de Belisario Domínguez, la senadora Liz Sánchez, del Grupo Parlamentario del Partido del Trabajo, rindió homenaje al legado del médico, orador y mártir chiapaneco, destacando su valentía y compromiso con la verdad frente a la tiranía.
Desde la tribuna del Senado, Sánchez recordó que antes de ser legislador, Domínguez fue un médico con vocación humanista, que convirtió su consultorio en Comitán en un refugio para los pobres y marginados. “No solo curó cuerpos, sino que luchó por elevar el espíritu de la comunidad”, expresó.
La senadora subrayó que el discurso que Domínguez pronunció el 23 de septiembre de 1913, en el que denunció sin rodeos al régimen de Victoriano Huerta, fue un acto de dignidad que le costó la vida, pero que encendió la resistencia nacional. “Fue martirizado, pero su voz se hizo un grito eterno de la conciencia nacional”, afirmó.
Liz Sánchez vinculó el legado de Domínguez con los principios de la Cuarta Transformación, asegurando que el espíritu de servicio, la honestidad y la defensa de la soberanía popular son hoy pilares del movimiento. “Recordar a Belisario Domínguez es un llamado a la acción, a ser gigantes en los momentos de gran apremio”, dijo.
La senadora concluyó con un llamado a la congruencia política y al compromiso ético: “Hoy honramos su memoria y reafirmamos nuestro compromiso a los principios de no robar, no mentir y no traicionar al pueblo de México”.

