A un mes de las agresiones y robos cometidos por el bloque negro contra negocios del Centro Histórico de la Ciudad de México (CDMX), estos lograron reabrir sus puertas gracias a préstamos personales y créditos de sus proveedores, pero no recibieron apoyos del gobierno, así lo denunció Gerardo López Becerra, presidente del Consejo para el Desarrollo del Pequeño Comercio y la Empresa Familiar, ConComercioPequeño S.C.
De lo ofrecido por el gobierno capitalino, sólo se lograron ‘facilidades’ para que los afectados pudieran presentar las denuncias ante el Ministerio Público. No hubo ningún apoyo económico para los trabajadores que dejaron de laborar los días que estuvieron cerrados los locales, tampoco financiamiento para reparar los daños, ni mucho menos recuperar la inversión que se perdió en mercancía robada”, expuso López Becerra.
Recordó que los robos del 2 de octubre generaron pérdidas por más de 300 millones de pesos y dio a conocer que “algunos de los locatarios recuperaron piezas que estuvieron consignadas como evidencia del saqueo, pero de las investigaciones realizadas para detener a los criminales no se sabe nada”.
Reactivación de negocios
Por su parte, Sergio Subich, empresario del ramo joyero, invitó a la ciudadanía a comprar en los locales ubicados en los portales del Centro Histórico, donde habrá descuentos del 10 al 50 por ciento en diversas joyas, con el fin de incentivar el consumo.
Sin embargo, López Becerra expuso al gobierno que, para reactivar las ventas en la zona, se requiere que el gobierno local retire al comercio ambulante que tiene tomadas las principales calles.
También se requiere “mantener abiertas las vialidades y calles que dan acceso al Centro Histórico, como son: Tlalpan y su continuación en avenida 20 de Noviembre, Eje Central Lázaro Cárdenas, Bolívar e Isabel la Católica, respetando el derecho de movilidad que tenemos todos los ciudadanos”.
Además, pidió acotar los actos realizados en la Plaza de la Constitución “a los que sean estrictamente necesarios”.
Piden cambios en protocolos
López Becerra expuso que “con el cierre de la vialidad en el primer cuadro, la plancha del Zócalo se ha convertido en el espacio de usos múltiples del gobierno capitalino, lo que lleva a constantes cierres de los accesos peatonales, dificultando a clientes y trabajadores la movilidad”.
Respecto a los protocolos de contención de las manifestaciones violentas, señaló que “los comerciantes y empresarios del Centro Histórico coinciden en que deben cambiar los protocolos de acción: no es posible seguir manteniendo el argumento del ‘gobierno que no es represor’. Ante el embate de estos grupos, a los que consideramos crimen organizado, no podemos tener a nuestros cuerpos de seguridad atados de manos. Necesitamos acciones efectivas en la prevención de los delitos, pero también en la investigación y sanción de los criminales”.
Fuente: excelsior

