En un paso histórico que llevaba décadas pendiente, las Comisiones Unidas de Organismos Internacionales, Relaciones Exteriores y Minería del Senado aprobaron el dictamen con Proyecto de Acuerdo para la ratificación del Convenio 176 sobre Seguridad y Salud en las Minas, un instrumento internacional que busca prevenir accidentes y enfermedades en este sector, protegiendo la vida y la salud de quienes trabajan en una de las actividades más riesgosas del mundo.

El senador Marko Cortés Mendoza, presidente de la Comisión de Organismos Internacionales, celebró la aprobación y subrayó que este convenio “empodera al trabajador minero, lo cuida en su salud, en su vida y obliga al gobierno y al empleador a garantizar condiciones seguras”. Destacó que, aunque los incidentes han disminuido, siguen ocurriendo, por lo que esta medida es indispensable para armonizar la legislación mexicana con los estándares de la Organización Internacional del Trabajo (OIT).

Cortés enfatizó que la minería, además de ser una gran aportación al Producto Interno Bruto, representa un tema de justicia laboral para quienes han perdido la vida en las minas y para las familias que dependen de esta actividad. Según datos de la OIT, la minería emplea apenas al 1% de la fuerza laboral mundial —unos 30 millones de personas—, pero concentra el 8% de los accidentes mortales en el trabajo y genera enfermedades graves como neumoconiosis y pérdida de audición por vibraciones.

La aprobación del Convenio 176 en Comisiones marca un avance significativo para garantizar derechos y condiciones dignas en un sector históricamente vulnerable. El senador hizo votos para que el dictamen sea votado pronto en el pleno, con el objetivo de enviar un mensaje claro: México está comprometido con la protección de la vida y la salud de sus trabajadores mineros y con la erradicación de prácticas que ponen en riesgo su integridad.