En una jornada marcada por la expectativa electoral, la candidata presidencial Jeannette Jara sorprendió al romper el protocolo y caminar varias cuadras hacia su local de votación en la comuna de Conchalí. Aunque se había organizado un dispositivo especial para su traslado, la aspirante decidió acercarse directamente a la ciudadanía, generando un ambiente de cercanía y entusiasmo.

Durante el recorrido, decenas de militantes corearon su nombre mientras Jara se detenía para saludar a vecinos, entre ellos adultos mayores y niños, en una muestra de contacto directo que busca reforzar su imagen de cercanía con la gente. El gesto se convirtió en uno de los momentos más comentados de la jornada, reflejando la estrategia de la candidata por proyectar empatía y compromiso en medio de unas elecciones consideradas decisivas para el futuro político de Chile.