En un encuentro con medios de comunicación, el diputado federal y coordinador parlamentario del Partido Revolucionario Institucional (PRI), Rubén Moreira Valdez, lanzó severas críticas contra la actuación de Morena en el Congreso, al denunciar la presencia de personas ajenas a la labor periodística dentro del Pleno, lo que calificó como una violación a las reglas de la Cámara y una estrategia deliberada para hostigar a la bancada priista.
Moreira advirtió que esta práctica no es aislada, sino recurrente: “Es la segunda vez que envían gente a la bancada del PRI para provocarnos. Llegan con preguntas diseñadas para que uno caiga en la respuesta”, señaló, tras relatar que los supuestos “influencers” se identifican como enviados por Morena y terminan alineados con legisladores oficialistas. El coordinador priista exigió que se garantice el acceso únicamente a periodistas acreditados, como medida de seguridad y para evitar que el recinto legislativo se convierta en un espacio de propaganda política.
El legislador fue más allá y acusó directamente a Gabriel García, exfuncionario señalado por desviar recursos de programas sociales para coaccionar el voto, de estar detrás de estas maniobras: “Ese personaje recorre el país amenazando a la gente con quitarle los apoyos si no vota por Morena. Es una provocación y una cobardía”, sentenció.
Moreira advirtió que en la próxima sesión de la Junta de Coordinación Política (Jucopo) propondrá blindar el acceso al Pleno: “El mejor blindaje es que estén los verdaderos periodistas y no estos porros pagados para hostigar”, afirmó. Además, retó a Morena a sostener un debate político real: “Si quieren debatir, pongamos sobre la mesa los presos políticos que tienen ahora, la caída de la economía, la violencia que no cesa y las acciones cosméticas de este gobierno”.
En la entrevista, el coordinador priista también abordó temas de alta sensibilidad, como el homicidio de Carlos Manzo, exigiendo una investigación completa que alcance a los autores intelectuales y revele las motivaciones del crimen. Sobre la reciente detención de implicados, advirtió: “Está bien, pero falta. Él no es intelectual, es material. Queremos saber quién lo mandó a matar”.
Respecto al uso excesivo de la fuerza en manifestaciones, Moreira cuestionó la actuación de autoridades capitalinas y estatales: “Es evidente el abuso. Muy propio de regímenes que tienden a ser totalitarios. Si Díaz Ordaz viviera, con Morena estuviera”, ironizó, tras señalar que las imágenes de jóvenes golpeados son una muestra del deterioro democrático.
El legislador también criticó la narrativa oficial que presume popularidad presidencial como sinónimo de eficiencia: “La Presidenta merece respeto, pero su gobierno está reprobado en seguridad, economía, educación y salud. Popularidad no significa buen gobierno”, enfatizó.
Finalmente, lanzó una advertencia sobre el futuro inmediato: “El régimen está tocado. El año que entra tendrán que explicarle a la población lo de los impuestos. Y para el 27, van a tener que jalar más impuestos o más deuda”, concluyó, dejando claro que el PRI no permitirá que el Congreso se convierta en un escenario de provocación y propaganda.

