Los Cuerpos de Seguridad Auxiliares del Estado de México (CUSAEM) avanzan en su proceso de saneamiento, capacitación y certificación, reafirmando su compromiso con la legalidad y la eficiencia operativa. Su titular, Carlos Javier Álvarez Castañeda, destacó que la corporación se encuentra en una etapa de fortalecimiento que permitirá garantizar su permanencia y servicio por muchos años más.

Actualmente se administra de manera responsable el recurso financiero, lo que permitirá cubrir adeudos históricos, mantener la estabilidad de la institución y mejorar la calidad del servicio. Entre las acciones implementadas se encuentra un nuevo sistema de evaluación, pagos y beneficios para los más de 22 mil elementos que integran la corporación.

En 2026, CUSAEM celebrará 80 años de servicio, conmemoración que se llevará a cabo en el corporativo de Lerma, lugar donde nació este agrupamiento que ha fungido como policía auxiliar en el Estado de México. A lo largo de ocho décadas, la institución ha logrado avances significativos en materia salarial, otorgando incrementos por encima del mínimo, así como la ampliación del servicio médico, incluyendo la modernización del hospital y la proyección de nuevas sedes.

Álvarez subrayó que la corporación se mantiene abierta al escrutinio público, pese a intentos de desinformación por parte de grupos minoritarios ajenos a la institución, que han difundido demandas ya atendidas. Señaló que se están erradicando prácticas nocivas del pasado, aunque persisten intereses que buscan conservar privilegios, lo cual no será permitido.

En materia financiera, se prevé que en 2026 se cubra una parte sustancial del adeudo con el ISSEMyM mediante un convenio que está en proceso de firma. Respecto al SAT, ya se liquidaron más de 600 millones de pesos, lo que permitirá al corporativo facturar los servicios que presta.

Al cumplir 80 años, CUSAEM refrenda sus principios de honestidad y lealtad, fortaleciendo su compromiso con las empresas que atiende y con la ciudadanía. En beneficio de sus elementos, se han mejorado prestaciones como seguro de vida y asistencia funeraria, además de atender demandas laborales orientadas a la dignificación y el respeto de derechos, en medio de retos financieros que la actual administración trabaja por resolver.