La Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV) oficializó este martes la revocación de la autorización para que Vector Casa de Bolsa opere en el sistema financiero mexicano, medida publicada en el Diario Oficial de la Federación (DOF). La decisión se tomó a solicitud expresa de la propia institución, mediante escrito presentado el 1 de diciembre de 2025, en apego al artículo 154 de la Ley del Mercado de Valores (LMV). La Junta de Gobierno de la CNBV aprobó la revocación por unanimidad, tras confirmar que la petición cumplía con todos los requisitos legales, financieros y operativos.

Antecedentes: señalamientos por lavado de dinero y presión regulatoria

La salida de Vector ocurre seis meses después de que el Departamento del Tesoro de Estados Unidos la señalara, junto con CIBanco e Intercam, por presuntas operaciones de lavado de dinero y financiamiento al crimen organizado. En junio, la Red de Control de Delitos Financieros (FinCEN) la identificó como “preocupación principal” en materia de lavado de dinero vinculado al tráfico de opioides provenientes de China y a cárteles mexicanos como el de Sinaloa y el del Golfo. Aunque las acusaciones no fueron comprobadas, el impacto reputacional y la pérdida de clientes aceleraron la decisión de cesar operaciones.

Proceso de desmantelamiento y transferencia de activos

Tras los señalamientos, Vector inició un proceso ordenado para transferir su cartera y activos a Finamex Casa de Bolsa, operación concretada en octubre. Paralelamente, su filial internacional, Vector Global Wealth Management Group, fue adquirida por Insigneo Financial Group, que asumirá más de 4,000 millones de dólares en activos de clientes en América y Estados Unidos. La CNBV también revocó la autorización de Vector Fondos, sociedad operadora de fondos de inversión, para transformarse en una sociedad anónima de capital variable, igualmente por solicitud voluntaria.

Historia y relevancia de Vector

Fundada originalmente como Sociedad Bursátil Mexicana en 1976 y adquirida por el empresario Alfonso Romo en 1987, Vector llegó a ser una de las casas de bolsa más grandes del país. Su salida marca el fin de una era en el mercado bursátil mexicano y se suma a la desaparición o venta de operaciones de otras instituciones señaladas por las autoridades estadounidenses, como CIBanco y Intercam, que también abandonaron el sector tras las acusaciones.