Ciudad de Puebla, Pue.— “La mejor forma de celebrar la Navidad es con resultados para las familias poblanas, cero corrupción y obras a una tercera parte de su costo”, afirmó el gobernador Alejandro Armenta al anunciar un ambicioso plan de infraestructura que convertirá a Puebla en el epicentro de conectividad regional durante 2026. El proyecto contempla la construcción y ampliación de carreteras a doble carril para enlazar regiones estratégicas como la Sierra Negra y la Mixteca, así como la renovación de vialidades que conectan con los siete estados vecinos.

Entre las obras anunciadas destacan la carretera a dos carriles que conectará San José Chiapa desde Acajete, Tepatlaxco y Amozoc; la vialidad hacia Atlixco; y la ampliación de la carretera federal hasta Río Frío. Además, la Intermixteca será ampliada a doble sentido en el tramo que va de Atlixco a Izúcar de Matamoros y Acatlán de Osorio, fortaleciendo la movilidad y el desarrollo económico en zonas históricamente rezagadas.

Armenta subrayó que estas acciones son posibles gracias a la adquisición de Módulos de Maquinaria y a los insumos donados por Petróleos Mexicanos (PEMEX), lo que permite ejecutar obras a una tercera parte del costo tradicional. “Sin moches y sin corrupción, el dinero alcanza”, enfatizó, al recordar que la pavimentación de calles en Puebla se ha realizado bajo este esquema de eficiencia y transparencia.

El plan para 2026 incluye la definición de 30 vialidades adicionales en la zona metropolitana de la capital, donde se aplicarán las 8 mil 500 toneladas de cemento asfáltico donadas por PEMEX. De manera paralela, se renovarán todas las carreteras que colindan con los estados vecinos y se pavimentarán vialidades secundarias en toda la entidad, consolidando la conectividad y el desarrollo regional.

Este anuncio se enmarca en la visión de un gobierno que apuesta por infraestructura como motor de transformación social y económica, con obras que no solo mejoran la movilidad, sino que generan empleo, fortalecen el turismo y reducen desigualdades. Puebla se posiciona así como la obra emblemática de una administración que busca dejar huella con resultados tangibles y sin corrupción.