En un emotivo evento que reunió a generaciones de músicos y amantes de la cultura, la Tuna Negro y Oro de la Universidad Autónoma del Estado de México (UAEMéx) celebró su 50 aniversario con una memorable presentación en el Auditorio “Ing. José Yurrieta Valdés” del Edificio Administrativo de la institución. Esta agrupación, que ha sido un pilar en la difusión de la música tradicional de tunas, ofreció un espectáculo lleno de nostalgia y reconocimiento a su vasta trayectoria.

La gala contó con la presencia de la secretaria de Difusión Cultural de la UAEMéx, María de las Mercedes Portilla Luja, quien elogió el compromiso y la dedicación de la Tuna Negro y Oro por su contribución a la vida cultural de la universidad y de la región. Durante la celebración, los integrantes de la agrupación rindieron homenaje a su fundador, Ciro Vega González, quien ha sido una figura fundamental desde los inicios de la Tuna, encargándose de los arreglos para cuerdas y voces que han definido el sonido característico del grupo.

Noé Ramos, actual director de la Tuna Negro y Oro, señaló que esta presentación es la segunda en conmemoración de las cinco décadas de existencia de la agrupación. «Hicimos una primera presentación el 26 de abril, que es justo el día que se fundó la agrupación, en 1974», mencionó Ramos. Este festejo no solo marcó un hito temporal, sino que también sirvió como un reencuentro generacional. Más de un centenar de personas que alguna vez formaron parte de la Tuna se reunieron para celebrar la hermandad y el amor por la música que los une.

Desde su fundación, la Tuna Negro y Oro ha sido un símbolo de orgullo para la UAEMéx. En 1990, la agrupación recibió la distinción de la Cruz de Santiago, un emblema de la tunería que reconoció su excelencia y dedicación. La Tuna ha representado a la máxima casa de estudios mexiquense en numerosas ocasiones, no solo en el territorio nacional, sino también en diversas ciudades de Estados Unidos, donde realizaron giras consecutivas durante finales del siglo pasado.

El compromiso de la Tuna Negro y Oro no solo se refleja en su calidad musical, sino también en los valores que inculcan a sus miembros. Según Noé Ramos, «el integrante más joven tiene 13 años y a todos se les pide que realicen estudios universitarios, que sean serviciales y humildes, que tengan la humildad para enseñar y para seguir aprendiendo». Estos principios han asegurado que la Tuna continúe siendo una entidad respetada y admirada.

La historia de la Tuna Negro y Oro comenzó en la Escuela Preparatoria, conformada originalmente por un grupo mixto de 11 mujeres y 34 hombres. Debutaron el 26 de abril de 1974, en el Edificio de Rectoría de la UAEMéx. Desde entonces, han mantenido una presencia constante en los festivales más importantes de tunas universitarias del país. Esta participación no solo ha servido para impulsar el talento de sus miembros más jóvenes, sino también para mantener viva una tradición que combina música, historia y camaradería.

Actualmente, la Tuna Negro y Oro está integrada por estudiantes universitarios y profesionistas que, en cada presentación, ponen en alto el nombre de la UAEMéx. Su misión de fomentar el arte del buen tunar se refleja en cada acorde y canción, en cada actuación y reconocimiento.

La celebración del 50 aniversario de la Tuna Negro y Oro no solo es un homenaje a su pasado, sino también un firme compromiso con su futuro. Es una reafirmación de los valores y la pasión por la música que ha perdurado a lo largo de cinco décadas, un testimonio de la vitalidad y relevancia de esta agrupación en el ámbito cultural y educativo. Mientras la Tuna continúa su camino, queda claro que su legado musical seguirá resonando en los corazones de muchos, inspirando a futuras generaciones a unirse a esta gran familia musical.